Módena - Italia
Ferrari es una institución en Módena, en Italia y en el mundo. Y hasta ahora tenía un museo pobretón más orientado a potenciar la tienda de artículos de merchandizing y a recordar las glorias del pasado que a mostrar su vocación de empresa que pisa fuerte en el mundo de la tecnología.
Sin complejos y con la mirada al futuro, el nuevo museo parte de un edificio sorprendente. Moderno a rabiar, empieza por abandonar el rojo que todos asocian a los coches y apuesta por un amarillo rompedor y brillante.
¿Rompedor? No tanto, porque la cosa tiene más vueltas. Los buenos entendedores saben que el amarillo es el color de Módena. Y los que conocen la marca verán en las aperturas de la cubierta un guiño a los huecos de
aireación del motor en el carenado de los viejos bólidos.
El nuevo museo es obra Jan Kaplický, un arquitecto checo, y del italiano Andrea Morgante. Con la nueva construcción en aluminio amarillo y cristal a base de suaves curvas, se propusieron arropar el viejo edificio de la primera nave de la fábrica hecha de ladrillo, de paredes rectas y de apariencia modesta, y crear con ambos un conjunto que abarcara la historia entera de los más famosos fabricantes de coches de carreras del mundo.
La Módena monumental, cargada de cultura, tiene un atractivo añadido y de máxima actualidad. Quien tenga interés por los coches, por la nueva arquitectura o viaje con chavales no puede perderse el nuevo museo de Ferrari.
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